¿Mi perro puede tener diabetes?

Esta es una de las preguntas más frecuente en la consulta veterinaria. Y desafortunadamente la respuesta es sí, ya que la diabetes es una enfermedad que pueden tener perros y gatos. Es importante que identifiquemos que al igual que en el ser humano, en perros y gatos hay dos tipos de diabetes: insulinodependientes (tipo 1) y no insulinodependientes (tipo 2). La tipo 1 puede ser genética o congénita y se les debe administrar insulina de por vida (siempre con la asesoría de un Médico Veterinario). La diabetes no insulinodependiente tiene que ver con otros factores como presencia de obesidad, mala alimentación, problemas de páncreas recurrentes, la buena noticia es que estos problemas se pueden prevenir y por lo tanto se puede prevenir el desarrollo de diabetes tipo 2.

En cuanto a manejo nutricional y prevención de la obesidad que es donde podemos trabajar en conjunto Médicos Veterinarios y propietarios de mascotas lo ideal es realizar lo siguiente:

• Usar dietas con aporte bajo a moderado de carbohidratos

• Usar dietas con un correcto aporte de proteína de origen animal

• Promover que nuestra mascota haga ejercicio (por lo menos de 15 a 20 minutos diarios) así evitamos que suba de peso

• Dar la dieta a nuestras mascotas en la cantidad que necesitan, evitando excesos de alimento, ya que esto se traduce en exceso de energía = sobrepeso/obesidad

• Evitar dar alimentos no aptos para nuestras mascotas como: pan, frituras (papas, embutidos, etc),  dulces en general, helados, chocolate (además de ser tóxico tiene mucha azúcar), frutas como naranja, mango, durazno, higo, plátano o frutas deshidratadas o en conserva, porque contienen mucha azúcar; evitar dar zanahorias y papas hervidas en exceso por su alto contenido de almidón.

• Evitar dar excesos de alimentos altos en grasa como sobras de alimento o la piel del pollo o grasa de la carne de vacuno.

Es importante que nuestro Médico Veterinario de cabecera nos asesore para que nos indique cuál es el mejor alimento para nuestra mascota, la cantidad que debe comer al día, e ir con él a revisiones regularmente para ver cuánto pesa nuestra mascota y revisar si esta o no saludable. Si observas que tu mascota toma mucha agua (más de lo que tomaría cuando hace calor), come mucho y muy rápido, orina mucho y a cada rato y además está perdiendo peso muy rápido sin estar en un programa de baja de peso, debemos ir al Médico Veterinario inmediatamente.